“El amor, madre a la patria, no es el amor ridículo a la tierra, ni a la yerba
que pisan nuestras plantas, es el odio invencible a quien la oprime, es el
rencor eterno a quien le ataca”… José Martí
En agosto de 1867, tres de los
principales iniciadores de la primera contienda por la libertad de Cuba; Pedro
Figueredo, Francisco Vicente Aguilera y Francisco Maceo Osorio se reúnen en el
bufete del primero en la ciudad de Bayamo, zona oriental de Cuba para ultimar los planes que viabilizarían el
movimiento revolucionario en la Isla.
Una vez aprobado el proyecto
concebido por Aguilera de constituir un Comité Revolucionario como paso inicial para insurrección
armada, a lo que la Historia de Cuba, por su duración, denominaría posteriormente:
Guerra de los Diez Años, Osorio le propone a
Figueredo que dado sus
conocimientos musicales compusiera una
música inspiradora de dicha lucha, algo así como la “Marsellesa” cubana, ya que
el Himno de La Marsellesa , constituía símbolo de rebeldía universal.
Ya para el 14 de agosto la
partitura musical se encontraba hecha para piano, Figueredo con suma
discreción, sin contar los verdaderos propósitos de la música compuesta, propone al maestro Manuel Muñoz Cedeño,
músico de Capilla de la Iglesia Mayor de Bayamo, la orquestación de dicha partitura, quien la orquestaría en mayo
de 1868.
Así se hizo y fue escuchada
previamente por Osorio, Vicente Aguilera, Manuel Anastasio Aguilera bajo
el pretexto de sordinas con el objetivo de disminuir la sonoridad, y muy
probablemente escuchada en una finca de
Najasa, entre Sibanicú y Guáimaro en la otrora zona centro oeste de Cuba, Camagüey .
Sin embargo, a Figueredo , llamado
por sus amigos “Perucho”, le interesaba hacer pública la música, hecho que
realiza, el 11 de junio de 1868, durante
una festividad religiosa de la ciudad bayamesa y que constituía un buen
pretexto. A dicha festividad asistió la
máxima autoridad española de la
ciudad, quien al escucharla, le pareció
y calificó como música “sospechosa”, calificativo al que riposta Figueredo arguyendo que dicha
autoridad no era músico.
Comienza la gesta de
Independencia cubana, para el 20 de octubre era tomada Bayamo por las tropas
insurrectas, Para ese entonces las
fuerzas libertadoras tarareaban la música compuesta por Figueredo, habiéndose
hecho la sugerencia de que le pusiera letra. Letra que creó al fragor de los combates, Y en esta
ocasión, siendo entonada por los
presentes, al ser copiada de mano en mano, por primera vez.
Para las autoridades de la Isla se convierte la
ciudad de Bayamo, en punto certero de ataque y reconquista, se convierte así en
el lugar estratégico para triunfo o derrota. La Ciudad, en tenaz resistencia, antes de sucumbir
prefiere arder en llamas e inmolarse por los patriotas cubanos que la defienden.
Como consecuencia del conflicto
bélico conspiradores revolucionarios requieren emigrar, y así llega,
memorizada la letra y música original conocida como La Bayamesa,
considerada como el Himno gestado para la contienda a Nassau, Bahamas. Y, como propagada por
juglares, va llegando la música guerrera
a unos, y a otros nativos de esta
tierra.
De su letra compuesta por seis
estrofas, las dos primeras fueron transcriptas en El Cubano Libre de la ciudad de Bayamo, de la ya entonces llamada La Bayamesa, que con el tiempo y en la
emigración sufre modificaciones y variaciones tanto armónicas como de letra, en
referencia a la composición original.
La versión de Nassau se lleva a
los Estados Unidos de Norteamérica, donde radicaban numerosos exiliados cubanos , y estos piden al patriota
y músico cubano Emilio Agramonte la
elaboración de un arreglo con la supuesta música y letra original, pero ya
estaban adulteradas. En el periódico Patria, se publicó el 25 de junio de 1892
el himno La Bayamesa, según la versión para voz y piano de Agramonte (véase
notas).
La versión de Nassau se torna
popular y se canta durante largo tiempo en múltiples actividades patrióticas,
sin que familiares y amigos de Figueredo pudieran corregirla.
En 1900 aparece una versión para
banda de José Antonio Rodríguez Ferrer* que parte de una de las versiones
anteriores y la convierte en pasodoble con introducción de toques de corneta de la caballería española. Este
año también José Marín Varona,
compositor camagüeyano, da a conocer su
versión con la introducción de José Marín y con el acompañamiento de los acordes de pasodoble .
Comienzan las protestas por
el ya conceptuado Himno encabezadas por
el patriota cubano Fernando Figueredo
Socarrás(1846-1929).
Ángel Figueredo, hijo menor de
Pedro Figueredo hace público el manuscrito original escrito por su padre, con
la esperanza de la rectificación, pero
ya se había registrado por el músico cubano José Antonio Rodríguez Ferrer en la
propiedad intelectual su arreglo
del Himno cubano, y esto ocurre a mediados del siglo XX, en esta versión se conservaba
de cierta manera la letra memorizada en Nassau.
Durante el transcurso de este
tiempo se encomienda otra versión al sobresaliente músico Hubert de Blank quien
repite la melodía, enmienda la letra y añade uno de los compases suprimidos en
la anterior versión.
De hecho, se concluye que durante la República, entre 1902 y
1958 se publicaron decenas de ediciones
con cambios en palabras, e incluso en
armonía musical, formas de acompañamiento y hasta cambios de palabras de las estrofas tanto en Cuba y
en el exterior, donde aparece nuestro himno en un libro editado en Barcelona,
España, así como en una colección de himnos editada en los Estados Unidos, en este caso donde se le cambiarían dos
estrofas completas a la letra original.
Un estudio realizado en 1954 de la pianista
cubana Flora Mora, ahonda en las tribulaciones del Himno de Bayamo, valorando
la composición original de su autor
Pedro Figueredo frente al resto de las versiones e insiste en la necesidad de
cubanizar la obra con el fin de
liberarla de extranjerismos y adulteraciones. E labora un arreglo para canto y
piano , sin introducción , a partir de la letra, melodía y con la inclusión de
las dos primeras estrofas de la letra
escrita al fragor del combate de Pedro Figueredo .
Posteriormente el artículo dos de
la Constitución Cubana de 1976 del 24 de febrero reconoce como símbolos
nacionales los que habían presidido por
más de cien años las luchas cubanas por
la independencia, por los derechos del pueblo
y por el progreso social ; La bandera de la estrella solitaria, el Himno
de Bayamo , el Escudo de la Palma Real.
Ese mismo año los notables
músicos cubanos Cuca Rivero y Mario Romeu editarían un folleto impreso en 1981
en las que realizaban un análisis histórico del Himno, excluyendo la cuarta estrofa del
manuscrito original e incluyen
la versión de Mario Romeu con introducción sobre letra y música de su original creador, como Himno Nacional de Cuba.
De las investigaciones realizadas
se señala que nuestro Himno no se enseñaba con cuidadoso
montaje sino como una tradición oral. Al
incluirse el estudio de la música en nuestras escuelas primarias se
pudiera plantear que debe ser
su tonalidad en Do mayor ya que ofrece la ventaja de que la voz se
mantenga la mayor parte del tiempo en el registro central; el sonido
más agudo no sobrepase al Re bemol y el más grave al La bemol. De esa forma haremos honor
a nuestro Himno Nacional fuente indudable
de identidad e inspiración de combate
del bravo, valiente y abnegado
pueblo cubano.
Letra actual del himno :
¡Al combate corred bayameses,
que la Patria os contempla orgullosa;
no temáis una muerte gloriosa,
que morir por la patria, es vivir!
En cadenas vivir, es vivir,
En afrenta y oprobio sumidos.
Del clarín escuchad el sonido,
¡A las armas valientes corred!
Pero en la versión original
contaba además con las siguientes estrofas:
No temáis; los feroces íberos
son cobardes cual todo tirano
no resisten al bravo cubano;
para siempre su imperio cayó.
¡Cuba libre! Ya España murió,
su poder y su orgullo ¿do es ido?
¡Del clarín escuchad el sonido
¡¡a las armas!!, valientes, corred!
Contemplad nuestras huestes triunfantes
contempladlos a ellos caídos,
por cobardes huyen vencidos:
por valientes, supimos triunfar
¡Cuba libre! podemos gritar
del cañón al terrible estampido.
¡Del clarín escuchad el sonido,
¡¡a las armas!!, valientes, corred
notas: Flora Mora siglo 19 y
20 La Habana Profesora , Pedagoga, y pianista . Funda el Conservatorio Granados. Profesora del
insigne músico cubano Haroldt Gramatges . Alumna de Enrique Granados .
Emilio Agramonte y Piña (Camagüey
1844 - La Habana 1918),Pianista y profesor de canto. Primo del patriota Ignacio
Agramonte, Nació en Camagüey, el 28 de noviembre de 1844. En 1865 se graduó en
España de Licenciado en Derecho y cursó allí estudios musicales, perfeccionados
luego en Italia y Francia. En 1893 fundó la Escuela de Ópera y Oratorio, en New
York, donde dirigió durante quince años la Gounod Society. Martí comisionó al
Maestro Agramonte para dar a conocer el canto de combate que había permanecido
y trasmitido en voz baja de una generación a otra de cubanos. En Patria, se
publicó el 25 de junio de 1892 el himno La Bayamesa, según la versión para voz
y piano de Agramonte. En 1902, instaurada la República, regresó a Cuba, e
inauguró en La Habana la Sociedad Coral Chaminade. Fue profesor en la Academia
Municipal de Música de la capital.Murió en La Habana, el 31 de diciembre de
1918.
José Marín Varona (Camagüey 1859
- La Habana 1912).Compositor, pianista y director de orquesta. Nació en
Camagüey, el 10 de marzo de 1859. Se radicó desde su juventud en La Habana
donde dirigió la orquesta del teatro Albisu. En 1896 estrenó su zarzuela El
brujo, y marchó poco después rumbo a Cayo Hueso, Estados Unidos, a causa de sus
ideas independentistas. En el exilio, aparte sus actividades musicales, hizo
periodismo. Al inaugurarse la República fue organizador y primer director de la
Banda del Estado Mayor del Ejército. Desarrolló la crítica musical, fundó la
Revista Cuba Musical y fue profesor en el Conservatorio habanero. Dirigió
diversas orquestas de compañías de zarzuelas. Como compositor muestra una obra
valiosa, que se inició con el vals Consuelo, y que incluye zarzuelas, romanzas,
obras de piano para niños, potpurrís y danzas. Murió en La Habana, el 17 de
septiembre de 1912.
FIGUEREDO SOCARRAS, FERNANDO
(1846-1929) 165 Aniv.
Patriota e historiador. Nace en
Camagüey el 9 de febrero de 1846. Se traslada a los Estados Unidos. Allí
estudia Ingeniería (1864) y forma parte del Club Revolucionario Cubano. Al
estallar la guerra de 1868, viene a Cuba. Participa en la toma de Bayamo el 18
de octubre de 1868. Ayudante-secretario de Carlos Manuel de Céspedes. Asiste a
la Asamblea Constituyente y ocupa los cargos de jefe del Estado Mayor de la
división comandada por el general Manuel de Jesús Calvar, de jefe de despacho
del presidente, coronel Juan B. Spotorno, y de representante a la Cámara en
1876. Esta al lado del general Antonio Maceo en la Protesta de Baraguá (1878) y
pasa a ser secretario del Gobierno Provisional que constituye Maceo, presidido
por Calvar. Marcha después al exilio (Santo Domingo y La Florida, EE.UU.) y es,
durante la lucha armada de 1895, delegado del Partido Revolucionario Cubano en
La Florida. Al finalizar la guerra regresa a Cuba, donde desempeña importantes cargos.
Cuando se constituye la República (1902), es designado Director General de
Comunicaciones. Al producirse la Segunda Intervención, es nombrado Tesorero
General de la República. Presidente de la Academia de la Historia de Cuba
(1912). Colabora en: Revista de Cayo Hueso, Patria, La Discusión, Pro Patria,
Cuba y América, Ideas e Ideales, Universal, Heraldo de Cuba, Vida Nueva. Autor
de: La revolución de Yara, el libro con que José Martí quería formar "el
alma del nuevo ejército", La toma de Bayamo y José Dolores Poyo.
Conferencia, entre otros. Firma sus trabajos como F. y F. F. Fundador de la
Convención Cubana. Es electo tres veces presidente de la Asociación de
Emigrados. Muere en La Habana el 13 de agosto de 1929
BIBLIOGRAFÍA:
DICCIONARIOS ENCICLOPÉDICOS
DE LA MÚSICA ESPAÑOLA E HISPANOAMERICANA. SALA DE MÚSICA.
SOCIEDAD GENERAL DE AUTORES
Y EDITORES 2000
BIBLIOTECA NACIONAL DE
CUBA.
Folleto sobre el Himno de Bayamo edición1981
http://www.nacion.cult.cu/sp/himno.htm
Ecuredwww.ecured.cu/index.php/José_Antonio_Rodríguez
www.bnjm.cu/sitios/fechario/2011/fechistfe.htm
Fuente: Historia de Cuba, 1492-1898; formación y liberación
de la nación / Eduardo Torres Cuevas y Oscar Loyola Vega.- C. Habana, Editorial
Pueblo y Educación, 2002. 404 p. Ilus.).
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